5 cosas que estuvieron "bien" con Saint Seiya Omega

Ok ok, todos detestaron este spin-off de la franquicia, que son más afeminados que los originales -más que la casa de Libra- que les faltó pasión, que fue muy suavizada etcetera. Pero para los que no la vieron y solo la critican de arriba, aqui les ofrecemos las 5 cosas que estuvieron "bien" de Saint Seiya Omega. Y Ojo, dije "bien", porque si llego a decir que estuvieron de p"$ mad#! seguro me crucifican.

Por cierto, este conteo tiene spoilers...

1-La batalla de Apsu/Koga vs Eden de Oríon

En el climax de la batalla final de la primera temporada, con varios caballeros muertos, otros completamente agotados y con una Athena moribunda, todo parecía terminado cuando nuestro protagonista se revela como el verdadero villano de la serie!! (antes de que Sasuke lo hiciera popular).
Hay que admitir que ese diseño tipo demonio de Kouga y su batalla contra el único caballero todavía en pié, el -aún no tan bueno- Eden de Orión a puño limpio fue absolutamente impresionante.
Una batalla bien coreografiada y animada, a puños sueltos, en el medio del mismísimo infierno!!
Se tiene que admitir que esta pelea fue tremenda en comparación a la animada con flash y en un campo de rositas que nos ofreció Toei anteriormente en la batalla final contra hades en las Ovas de la serie clásica.

2-El flashback de la última batalla entre Athena y Mars

En un momento de la serie nos cuentan como fue que todas las cosas terminaron mal como nos muestran al inicio de la serie, con los 5 bronceados principales retirados y el Santuario escaso de guerreros:

Resulta que después de las batallas contra Asgard, Poseidón y Hades, un completamente diezmado ejército de Athena que solo contaba con Seiya como único dorado, más los cuatro bronceados clásicos -Ikki, Shun, Hyoga y Shiryu- se enfrentaban a un ejército más númeroso como el de Mars/Marte, en una batalla que se dice duró varios días. Vale agregar que por fin Athena tenia un rol activo en la batalla, peleando codo a codo con Seiya, en vez de ser otra vez de damisela en apuros.

Hasta que en medio del climax final, donde los buenos van ganando otro enemigo lanza al campo de batalla un jodido meteorito que amenazaba con destruir el planeta entero, siendo Athena la única que pudo detenerlo, pero al costo de dejarla gravemente debilitada y encima todo ese choque de energias malignas y místicas upgradeó a su rival, Mars!! Que se perdió en la locura de un poder inmenso que no podía dominar y que a la postre dejó incapacitados de usar su cosmos a los caballeros clásicos!

3-La reivindicación a caballeros de oro anteriormente desprestigiados

La serie tenia la obligación de presentar nuevas versiones de caballeros dorados, algo difícil si consideramos
que la participación de este grupo es lo más grandioso que tiene la serie.
Pues lo logró a medias, es verdad, pero nos ofreció brillantes versiones de caballeros de oro que anteriormente eran sobrestimados. Concretamente nos brindó geniales versiones de Tauro, Piscis y Libra.

Tauro por fin tenia un pasado trágico y un motivo concreto porque pelear, su cambio y maduración como personaje y aliado de Athena fue tan grande y correctamente desarrollado que merecidamente al final de la serie no solo sobrevive, sino que lo nombran Patriarca! (ya les avisé que este informe tendría spoilers).

Piscis nos brindo uno de los mejores villanos de la serie, en vez de ser un caballero de dudosa sexualidad que se creé hermoso. Un tipo que trollea a los protagonistas solo por diversión y que no se acobarda ante nadie. Lo mejor de la serie fueron sus peleas a puño limpio contra todo aquel que se le aparecía. Hasta el punto que lo traicionan y lo dejan a merced del villano final, un dios terriblemente poderoso y lejos de acobardarse se encabrona y dice "al carajo, lo mataré y dominaré yo el mundo!" y si bien pierde y muere.
Esa decición y frialdad merecidamente lo pone como el mejor Piscis hasta la fecha.

Y si bien Dokko es un gran personaje, Gembu de Libra nos cerró la boca a todos, como un santo dorado que no solo tiene un buen diseño, sino que es un líder natural, que se enfrenta a cualquiera y no tiene miedo de morir por sus amigos. Siendo una guía para los jóvenes caballeros más acertada que los anteriores bronceados.

Ok, la serie nos brindó también horribles versiones de Géminis, Scorpio y Cancer, pero no se puede tener todo, además que este conteó es de las cosas que hizo bien la serie.

4-Interesante forma de presentar a los palesinos

Los enemigos aparecidos en la segunda temporada de Omega, los palesianos, divididos en diferentes rangos de acuerdo a su grado de poder fueron excelentes.
Por primera ves se sintió que existía una gran diferencia de poderes entre los enemigos y los santos de Athena, y lejos de ser carne de cañon, hasta los más bajos soldados de los palesianos ofrecían batalla. Llegando a matar a varios caballeros de Athena sin ningún esfuerzo.

Destaco principalmente el paleasiano que parecía un arlequín que siempre parecía saber más de lo que aparenta, ese otro tipo que peleaba "cuando quería" y era a puño limpio, sin armadura siquiera, teniendo que llamar al grosso de Ikki para que pudieran siquiera hacerle frente a su terrible poder.  O ese otro palesiano que, si bien recibió ayuda, mató a Gembu, siendo de rango inferior.

Por primera vez en Saint Seiya se sentía que había una guerra sin cuartel, donde morían soldados de ambos bandos cada segundo, en vez de "una guerrilla de infiltración" como era costumbre en la serie clásica donde solo peleaban los cinco principales.

5-Una loli como villana principal:

Ok, esta es trampa, pero al final ofreció muchas escenas memorables que verdaderamente valen la pena reseñar:

En un punto al principio de la trama a Seiya se le encomienda matarla cuando era muy pequeña y carecia de poder alguno. Encima la "orden" de matarla viene expresamente de la mismísima Athena.
Es loco la ironía del momento, ya que a Seiya se lo pone en la misma situación en la que Saga estuvo hace muchos años cuando tuvo que matar a Athena y justamente Aioros, el anterior caballero de Sagitario, la detuvo. Incluso le dan la misma daga para que haga tan miserable encargo.
Si bien Seiya al final no cumple su tarea, es loco ver como tiempo después reconoce abiertamente que lo ideal hubiera sido matarla sin dudarlo. Por lo que nos damos cuenta de una maduración del personaje y hasta que punto está de acuerdo con seguir las ordenes de un ser superior.

Otra escena interesante es cuando Pallas se "va a jugar" al campo de batalla, se encuentra con Kga y se enamora de él, hasta le punto de querer besarle obligandolo a que sea su caballero de aquí en adelante.
Kog se rehusa y desata la ira de la diosa en una escena donde cualquier cosa podia pasar. Esto fue genial porque refleja exactamente la personalidad egoísta de los dioses que se cuentan en la mitología real griega.